Perú está entre los diez principales proveedores de legumbres de EE.UU.
Perú se encuentra entre los diez principales proveedores de legumbres de Estados Unidos, y si bien no le exporta productos manufacturados en base a legumbres como los señalados en este informe, sí realiza envíos de conservas de frejoles, frejoles congelados, frejoles secos, pallares, arverjas y habas, informó la Oficina Comercial (Ocex) del Perú en Nueva York.
A agosto del 2018 las exportaciones de legumbres mostraron una recuperación significativa (40% en algunos casos), por lo que al finalizar el año éstas habrían superado los US$ 50 millones registrados el 2017.
Considerando el crecimiento del mercado de menestras en Estados Unidos debido a la introducción de nuevos productos en el segmento de comida saludable, sería importante que las empresas peruanas consideren seriamente el desarrollo de productos de calidad con valor agregado de acuerdo a las tendencias del mercado estadounidense.
Otra sugerencia redunda en la necesidad de identificar a los distribuidores que están abasteciendo este nuevo nicho. Por ejemplo, aquellas empresas que se dirigen a los restaurantes y establecimientos de alimentos veganos, así como marcas de consumo masivo que han comenzado a desarrollar alimentos a base de menestras, como leche y carnes vegetales, entre otros.
Estas estrategias contribuirían a que el Perú siga incrementando sus exportaciones en esta industria en expansión, señala la Ocex.
Demanda
Las leguminosas, popularmente conocidas como menestras -un grupo de semillas que incluye principalmente a las arvejas, los frijoles y las lentejas-, muestran un gran aumento de su demanda en Estados Unidos, en parte a través de las nuevas formas que viene tomando las diversas presentaciones de su consumo.
Éstas contienen una amplia variedad de nutrientes, son muy saludables y económicas, y de buen sabor, por lo que ya forman parte de prácticamente cualquier plan de alimentación.
Además, el protagonismo de las proteínas vegetales en el mercado estadounidense, las menestras basan el incremento de su consumo también en las modas de las comidas étnicas o de culturas específicas, además de ingresar muy fuertemente a los circuitos de comida rápida o informal y de snacks.
Un ejemplo notable de esta tendencia es la gran aceptación que ha tenido el humus, un puré o batido hecho a base de garbanzos, del cual se vendía apenas US$ 10 millones anuales en los noventa, pero cuyo mercado se ha incrementado a más de US$ 750 millones anuales últimamente.
Se vende en muchos casos refrigerado ya listo para su consumo y en diferentes sabores en los super mercados o bodegas y tiendas especializadas. Ya se ha empezado a elaborar humus con otras menestras y el Perú podría también promover un humus de quinua con vegetales como pimientos, ajíes, aceitunas, alcachofas o espárragos.
Desde muchos años atrás, la carne de vacuno -o roja- ha sido una de las opciones de la alimentación tradicional más cuestionada, además de las críticas que se les hacen a las cadenas de comida rápida.
La revista Forbes juntó los dos conceptos en un artículo titulado “Move Over McDonald’s: The Future of Fast Food is Vegan” o “Hazte a un lado McDonald’s: El futuro de la comida rápida es vegano”, donde se analizaban las dificultades de las grandes cadenas de hamburguesas de regenerarse y mantener un adecuado número de clientes fieles.
En cambio, se comentaba los casos de dos compañías que apuestan claramente por menús vegetarianos y mostraban muy dinámicos crecimientos.
Una de ellas, en California, es Plant Power Fast Food, que aprovechaba los locales que ante el cambio de hábitos alimenticios venían dejando las grandes marcas como Burger King y Mc Donald’s, para reconvertirlos en restaurantes de comida rápida 100% vegana.
Sus hamburguesas están hechas principalmente de frijoles negros. Al otro lado del país, en la ciudad de Nueva York, la marca By Chloe también ha optado por un formato de comida rápida con un menú 100% vegano.
No sólo sus hamburguesas contienen menestras, sino que diferentes legumbres se encuentran en muchas de las recetas que ofrecen a sus comensales.
La Ocex del Perú en Nueva York realizó en diciembre pasado una visita a uno de sus locales y la encargada de ese turno explicó que…“estamos ampliando la cocina de este local para atender el alto tráfico de clientes que esperamos el próximo año, en especial cuando pase el invierno. Ustedes mismos pueden observar ahora que son ya las nueve de la noche y en ningún momento la cola ha bajado de diez personas esperando hacer su pedido”.
La creciente preferencia de los consumidores por las menestras no ha pasado desapercibida tampoco para las grandes empresas e incluso para los inversionistas institucionales. La compañía Ripple, que fabrica leches en base a lentejas, acaba de recibir más de US$ 100 millones de un grupo de importantes inversionistas.
Sus productos contienen la mitad de los azúcares y el doble de calcio que la leche regular. Además, las leches vegetales o veganas son muy populares debido a que una significativa proporción de la población presenta síntomas de intolerancia a la lactosa.
Los productos Ripple ya se encuentran en más de 10,000 supermercados americanos incluyendo grandes cadenas como Whole Foods, Target, Kroger y son uno de los pilares para que las ventas de leches vegetales alcance ya US$ 1.6 mil millones.
Otra compañía que acaba de recibir unos US$ 50 millones de inversión es Beyond Meats. Su misión, a través de sus productos de carnes vegetales, es además tratar de concientizar al consumidor en referencia a que comer carne roja no solo es malo para la salud, sino también para el medio ambiente. Ellos publicitan que el 51% de los gases emitidos que incrementan el calentamiento global provienen de los establos ganaderos.
Este tipo de información es algo que ha impactado fuertemente en los consumidores más responsables y preocupados por el ambiente. Estados Unidos es un gran productor de distintas legumbres.
Sus agricultores, estimulados por el incremento de la demanda por menestras –que se estima en 10% anual por Euromonitor-, han aumentado su producción en cerca de 20% y ya alcanzan los 3.2 millones de TM anuales.
Fuente: Diario Gestión