Desde que el Gobierno argentino decretó la cuarentena obligatoria ante el avance de la pandemia del coronavirus, la demanda de frutas y verduras entre los consumidores ha crecido exponencialmente, siendo los productos más consumidos las papas, las zanahorias y las naranjas, con precios que rondan los $40, $110 y $80 el kilo, respectivamente, en la Ciudad de Buenos Aires.

«Se come totalmente distinto en las últimas tres semanas. El 90% de la Argentina está encerrada en sus casas y han cambiado los hábitos de alimentación», afirmó el ingeniero agrónomo Mariano Winograd. «Aún no se inició la cosecha de naranja y en consecuencia lo que hay disponible es lo que quedó del año pasado», explicó.

Con respecto a las papas, Winograd indicó que el consumo se multiplicó por cuatro, ya que es un producto adecuado para una cuarentena porque no se descompone, se puede comprar en cantidad y almacenar.

En cuanto a las zanahorias, hay una escasez relativa en el mercado. «La zanahoria se está cosechando en este momento en una zona muy particular de Mendoza y hay poca cantidad. Si la demanda estalla la única forma que tiene de regularse ese desequilibrio entre oferta y demanda es a través de una suba de precios. Ahora bien, si el valor de determinado producto es caro hay que optar por no comprar ese alimento y sustituirlo por otro. Por ejemplo, reemplazar la naranja por la mandarina, que en breve comenzará la temporada», recomendó.

A finales de marzo, el Gobierno nombró al frente del Mercado Central de Buenos Aires al coordinador nacional de la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT), Nahuel Levaggi, quien ha impulsado un acuerdo para fijar precios de referencia con el objetivo de contener los precios en los comercios retail.

Fuente: Fresh Plaza