«Nuestras frutas y hortalizas destacan no solo por la ausencia de níquel, histamina y otros metales pesados, sino también por la posibilidad de dejar que nuestros clientes elijan la técnica de cultivo que prefieran. De hecho, además del cultivo hidropónico, producimos fresas, tomates y berenjenas mediante un sistema aeropónico vertical en 4.000 metros cuadrados en total», explica Ivan Santarcangelo, que, junto con Anna Cirigliano, dirige FruitHydroSinni, una empresa de Policoro (Matera, Italia) con 10 años de experiencia en la producción y comercialización de frutas y hortalizas producidas mediante aeroponía e hidroponía.

«A diferencia del sistema hidropónico, el sistema aeropónico no sumerge las raíces en una sustancia nutritiva. De hecho, las plantas están suspendidas en un entorno que se rocía periódicamente con agua y sustancias minerales. De esa manera, las plantas están mejor ventiladas y oxigenadas y crecen más rápido que con el sistema tradicional, y con menos problemas de salud».

«En términos de calidad, los productos tienen un tamaño uniforme y cualidades organolépticas constantes. En FruitHydroSinni, el sistema aeropónico es una técnica de cultivo muy avanzada que utiliza hasta un 95% menos de agua».

«Estamos notando que los pedidos tanto de operadores (B2B) como de consumidores particulares a través de nuestra sección de comercio electrónico (B2C) están aumentando. Los tomates y las fresas son los productos más populares, aunque las fresas se están empezando a volver muy perecederas con el aumento de las temperaturas. Las fresas maduras se destinan a la industria de procesamiento para hacer mermeladas y extractos, todo libre de níquel e histamina».

Fuente: Freshplaza