El Puerto de Long Beach ha visto más «viajes en blanco» debido a la pandemia
Como puerto fundamental para el comercio transpacífico, el Puerto de Long Beach (POLB), California, desempeña un papel cada vez más importante en el transporte de frutas y hortalizas.
Mientras que los puertos de la costa oeste representan por sí solos el 81% del mercado de exportación, POLB se considera un gran complejo portuario con su puerto hermano, el Puerto de Los Ángeles (POLA). «Juntos, los dos puertos representan el 24% de la cuota de mercado exportada de los Estados Unidos», dice Heejoo Ramsey, subgerente de Marketing de POLB.
Ramsey dice que el puerto ve pasar muchos productos agrícolas desde el Noroeste del Pacífico hasta California, con destino a países que dependen en gran medida de esas exportaciones, entre ellos Corea, Japón, Taiwán y Hong Kong. «Acabamos de terminar la temporada de cítricos nacionales y después de eso, son las patatas las que pasan por los puertos. Luego van las hortalizas en los meses de verano y después, las uvas», explica Ramsey.
«La cantidad de importaciones es significativamente menor que la de exportaciones», añade Ramsey. «Solo alrededor del 2% de la cuota de mercado de EE. UU. pasa por nuestro puerto», entre POLB y POLA. Eso incluye las bananas, el mayor producto importado en el país. Dicho esto, debido a que POLB es principalmente un puerto de contenedores y las bananas son envíos a granel, normalmente enviados en buques, es más probable que se dirijan a puertos como el Puerto de San Diego y el Puerto Hueneme.
Cítricos
En cuanto al año 2020, dado que POLB se encontraba enviando cítricos a Asia en ese momento, se dio un giro afortunado de los acontecimientos cuando se produjo la pandemia de COVID-19. «Hacia el final de los envíos de uvas, comienza la temporada de cítricos. Y justo antes del Año Nuevo chino, muchos cítricos se dirigen a Corea y Japón, que son grandes compradores de cítricos», explica Ramsey.
Sin embargo, los envíos de cítricos se han mantenido fuertes durante toda la pandemia. «Nuestros transportistas nos dijeron que sus volúmenes no habían disminuido. Japón y Corea no han cerrado sus fronteras como en India, por ejemplo, y sus negocios siguieron funcionando y los restaurantes permanecieron abiertos en ambos países, por lo que la demanda siguió existiendo», comenta. Otros acontecimientos también fortalecieron el mercado de exportación de cítricos de los Estados Unidos. «El Gobierno de Corea del Sur, por ejemplo, repartió paquetes a las familias afectadas por la COVID-19, que incluían muchas frutas y hortalizas con vitaminas C y A, y los cítricos que estaban en esas cajas se trasladaron a través de nuestros puertos», señala Ramsey.
Por otro lado, lo que sí resultó ser un desafío relacionado con la pandemia fueron los ‘viajes en blanco’. «Todos los puertos de los EE. UU. se vieron afectados por esa situación debido a la COVID-19», continúa Ramsey. «Los barcos hacen un viaje de ida y vuelta y tienen que traer algo de Asia, por ejemplo, para entrar y poder volver a salir. Si no hay nada que enviar, los buques se quedan vacíos, y hemos tenido ese problema este año más que nunca».
La demanda se mantuvo fuerte
Sin embargo, los pedidos de frutas y hortalizas no disminuyeron. «Debido a eso y a que no hay salidas de barcos cada dos semanas, el acceso al equipo de contenedores refrigerados también ha sido un desafío para muchos de los transportistas», agrega Ramsey. Para compensar eso, los barcos intentaron cargar más la semana anterior y posterior a la semana de ‘viajes en blanco’. «Y luego se daba una semana en la que no se cargaba nada y todos tenían que esperar hasta que llegara un barco. Los altibajos fueron muy drásticos, y también causaron problemas como la falta de camioneros disponibles por no tener trabajo en muchas semanas».
A su vez, se contrataron barcos graneleros para trasladar los cítricos a Asia en esas semanas libres, lo que ayudó, pero en menor medida. Esos buques graneleros solo podían mover aproximadamente 345 contenedores, mientras que un buque normal transporta más de 1.000 contenedores.
¿Aumento del volumen?
Aunque ese problema parece haber quedado atrás, de cara al futuro, Ramsey dice que los transportistas marítimos están trabajando para aumentar el volumen de los productos que se mueven y algunos han añadido más contenedores refrigerados a su flota. «Por lo tanto, de ahora en adelante, deberíamos ver más volumen», añade.
El aumento de volumen es beneficioso dado el gran interés en los productos de calidad de los Estados Unidos. «Nuestros exportadores de productos agrícolas nos han informado de que la mayoría de los países que compran productos agrícolas creen que Estados Unidos tiene una calidad superior», concluye Wendy Fung, gerente de Desarrollo de Negocios de Export Cargo en POLB, señalando que eso incluye productos clave de California como cerezas, uvas y cítricos. «Por lo tanto, a medida que aumenten los consumidores de clase media de países más prósperos como Corea y Japón y, hasta cierto punto, China, habrá cada vez más demanda de productos estadounidenses».