Cuando eres el segundo mayor productor de bananas y aguacates del país, y la cosecha de ambos se produce al mismo tiempo, necesitas instalaciones grandes. Ese fue el desafío que enfrentó Howe Farming Enterprises cuando la capacidad de su almacén empezó a ser insuficiente.

Como muchas empresas agrícolas en Far North Queensland, Howe Farming Enterprises comenzó siendo pequeña, experimentando con tabaco y hortalizas a principios de los años 50.

Con el paso del tiempo, la familia se diversificó con aguacates (1979), cacahuetes (1990), bananas (1996), café (2000) y, recientemente, arándanos.

El negocio de segunda generación, que comenzó como una finca financiada con un préstamo de liquidez de un soldado, hoy en día es una empresa que opera 15 propiedades ubicadas a una hora de Cairns, y emplea a 500 personas, con un enfoque en los empleados locales e indígenas, ofreciendo fruta a los principales retailers a través de la empresa local MacKays Marketing.

En resumen, las bananas y aguacates se cosechan, se llevan a las instalaciones de envasado, se clasifican, envasan y refrigeran en espera de su entrega. La continua expansión ha tenido su lado negativo: el equipo, el almacenamiento y el envasado no han sido capaces de mantener el ritmo de un negocio que ha ido viento en popa.

Gran parte de las instalaciones de envasado de aguacate estaba en su mejor momento hace 18 años, por lo tanto, la zona principal de envasado ya no estaba aislada, lo que suponía que el personal tenía que trabajar en un ambiente demasiado caluroso y lleno de polvo, y la capacidad de la cámara de refrigeración simplemente no daba abasto con el volumen. El resultado fue la manipulación en varios lugares y el aumento de la descomposición, lo que se tradujo en cada vez más fruta rechazada que no cumplía con las especificaciones del supermercado.

«La maquinaria para el aguacate que teníamos ya no cubría nuestras necesidades, habíamos superado la capacidad», dice Alexander Larsen, gerente de operaciones de Howe Farming Enterprises. «Necesitábamos unas instalaciones que tuvieran la capacidad de acomodar nuevos equipos, aumentar el espacio de la cámara de refrigeración y las instalaciones de maduración, así como permitir que nos aventuráramos en la producción de banana en polvo, para que el mercado de edulcorantes naturales utilizara la fruta rechazada. Simplemente no había unas instalaciones tan grandes en la zona».

Por casualidad, Entegra Signature Structures estaba en la zona asistiendo a unas Jornadas en Far North Queensland. Una conversación llevó a otra y al final el consultor de diseño Greg McCalman visitó Howe Farming Enterprises, y luego trabajó con el negocio para crear la solución ideal para el almacén.

«Con un nuevo almacén, Howes tuvo la oportunidad perfecta de diseñar el edificio para que se adaptase a su propósito», continúa Greg. «Buscamos formas de asegurarnos de que el flujo de trabajo se optimizara a partir de cómo la fruta llegaba a las instalaciones y cómo se entregaba. Trabajamos en la mejor manera de instalar la nueva maquinaria de clasificación de aguacates, que medía 65 m de largo, para que encajara a la perfección con la forma en que Howe Farming recibe y despacha la fruta. También se tuvieron en cuenta las zonas para el almacenamiento refrigerado, el espacio de oficina y el espacio para el equipo de liofilización para el polvo de bananas”.

El resultado final fue un almacén con ventilación, de 120 metros de largo y 56 metros de ancho, con un poste central por entramado. La falta de postes internos facilitó que la maquinaria de clasificación de aguacates se acomodara fácilmente», añade Greg. «Ahora es uno de los almacenes más grandes de la zona y cumple con todas las clasificaciones necesarias». El equipo de Howe fue un paso más allá e incluyó un techo curvo, para darle un toque más estético.

La preparación del lugar fue llevada a cabo por el personal de Howes, que estaba ansioso por mostrar sus habilidades con las excavadoras y traíllas en una nueva tarea, en lugar de preparar la tierra para los cultivos. En total, la construcción de las instalaciones llevó alrededor de seis semanas.

El resultado final es un almacén que ha triplicado su capacidad para los aguacates y duplicado la de bananas, y todo concentrado en un único lugar, a 100 metros de la finca, el corazón de la operación. El almacenamiento en frío funciona actualmente a una capacidad de alrededor del 50%, lo que permitirá que el negocio pueda dar cabida a un mayor crecimiento en el futuro.

«El equipo para los aguacates funciona unas tres veces más rápido que la antigua línea que teníamos, por lo que ya estamos viendo un aumento de la eficiencia y es mucho más seguro de utilizar», comparte Alexander.

«Organizar el flujo de trabajo también ha significado poder segregar nuestro acceso peatonal en las zonas de los montacargas, y en todo el almacén, tenemos una temperatura estable, lo que hace que el personal esté más cómodo. Las cámaras de refrigeración adicionales nos permiten mantener el stock más tiempo antes de que madure, lo que da como resultado un menor deterioro. Una mejora como esa, aunque sea solo del 2%, puede marcar una gran diferencia para nosotros».

Fuente: Freshplaza