La socióloga María Isabel Remy, viceministra de Políticas Agrarias, planteó el desarrollo de una nueva forma de pensar la política de desarrollo rural y seguridad alimentaria

A través del proyecto ‘Perú Debate 2021: propuestas hacia un mejor gobierno’, la socióloga María Isabel Remy, actual viceministra de Políticas Agrarias, planteó el desarrollo de una nueva forma de pensar la política de desarrollo rural y seguridad alimentaria.

Su propuesta de política de desarrollo rural y seguridad alimentaria, que requiere el concurso de diversos sectores, tiene como objetivo lograr procesos de desarrollo en territorios rurales como procesos de crecimiento simultáneo de la producción y del bienestar de las familias de los productores y trabajadores, particularmente de los productores de alimentos, con protección de la calidad de los recursos y del medio ambiente.

“El primer elemento clave es abandonar una visión sectorial y pasar a una visión que incorpore dentro de la mirada de esta política, una integración de diversos sectores que hoy en día están desarticulados. Sin esa articulación, no es posible dar una respuesta adecuada a las cuestiones de la política rural. Lo segundo es que se concibe el ámbito rural como un territorio, por lo tanto, hay que articular en aquel, un conjunto de políticas, que involucran diversos sectores, pero también gobiernos regionales y provinciales”, señaló Ivan Lanegra, representante de la Asociación Civil Transparencia, acerca de la propuesta de la socióloga.

Objetivos específicos

Los objetivos específicos de la propuesta son, en primer lugar, incrementar la dotación de activos, tangibles (equipos/infraestructura) e intangibles (conocimiento), de las familias de pequeños agricultores.

Asimismo, incrementar la rentabilidad (servicios públicos, financieros y asociatividad) de los activos familiares; así como la dotación y calidad de servicios básicos y sociales en los centros poblados rurales.

Recomendaciones

Según María Isabel Remy, la implementación de su política demanda una decisión del más alto nivel: debe quebrar inercias y estar articulada a la sociedad civil.

Se tiene que conformar un Sub Gabinete de Desarrollo Rural integrado por los ministros de Agricultura (que funcionaría como ente coordinador y acogería a la Dirección Ejecutiva), Desarrollo e Inclusión Social, Ambiente y Transportes y Comunicaciones.

Además, se debe crear una estructura descentralizada que integre a los gobiernos regionales. Estos constituirían un Comité Regional de Desarrollo Rural integrado por gerencias de desarrollo económico y de desarrollo social, y los órganos desconcentrados de los ministerios del Sub Gabinete. El ámbito de planeamiento y de ejecución debe ser la provincia: espacio de articulación de los territorios rurales con los mercados, de planeamiento de infraestructura de vialidad y de servicios, así como de gestión ambiental.

Finalmente, es necesario racionalizar la asignación de recursos públicos (categorías presupuestales) y definir con más claridad la manera de operar del FAE Agro y de AgroBanco de manera que se introduzcan productos financieros adaptados a los pequeños productores y se sostenga la próxima campaña agrícola.

Fuente: Agronoticias