Hace tiempo que vendes frutas y hortalizas con etiquetas de tu logo. Piensas que es barato, que fidelizas al consumidor final y que a largo plazo te hará vender más por tener una marca reconocible. Fácil, ¿no? Lo es. Aunque ahora las cosas han cambiado. Y han cambiado para bien. Déjame que te cuente la historia de Pedro.

Pedro es un exportador de banano colombiano y su empresa exporta fruta a Europa y EE. UU. Pedro comercializa todas sus bananas con una etiqueta en la que sale su marca, Bananora. La fruta de Pedro recorre largos viajes para terminar vendiéndose en las estanterías de supermercados europeos y americanos.

Marie es profesora en un instituto de París. Hace la compra semanal todos los viernes en el supermercado más cercano a su casa y desde hace unos meses consume bananas de la marca Bananora, porque la primera vez que compró le gustaron mucho.

Marie es deportista y a sus compañeros del gimnasio les ha comentado lo ricos que le quedan los desayunos con unas rodajas de banana. Comenta que ella compra las de la marca Bananora. Marie ha comentado la marca porque le encanta el sabor y porque empatiza y se siente parte del proyecto de Pedro.

Resulta que en las bananas de Pedro no solo sale la marca Bananora. Bajo el logo hay un pequeño código QR que se lee con el móvil y que Marie escaneó por curiosidad la primera vez que compró la fruta. Desde entonces lo hace de vez en cuando para saber qué tal le va a Pedro.

Resulta que Pedro es el gerente de una empresa familiar de 70 personas que lleva cultivando bananas dos generaciones. Son productores concienciados con el planeta que cultivan de manera sostenible y ecológica. Su objetivo es llevar el sabor de sus bananas a Europa y América promoviendo con su fruta un estilo de vida sano. Las bananas que compró Marie salieron del complejo de Pedro en Colombia el 22 de marzo y llegaron a Francia el 5 de abril. Se transportaron en contenedor reefer en condiciones de temperatura y humedad óptimas y el viaje se corresponde con la tercera exportación de bananas del año que ha hecho Pedro a Europa. 

Todo esto ha podido suceder porque Pedro habló con CLCircular y puso un pequeño código QR a sus etiquetas…

Un año después, Bananora aumentó sus ventas un 23%.

Desde CLCircular te ofrecemos servicios de transformación digital como el de la historia de Pedro. Monitorizamos en tiempo real los transportes de productos perecederos y te damos la posibilidad de que gracias a esa monitorización puedas transmitir historias personalizadas para cada consumidor con etiquetas inteligentes. Historias reales para cada fruta.

Fuente: Freshplaza