La región representa el 16% de las exportaciones agrícolas globales, 12% de la producción agrícola mundial y posee el 24% de la tierra cultivable

América Latina tiene el potencial para ser el gran abastecedor de alimentos para todo el mundo, auguró el presidente ejecutivo de CropLife Latin America, José Perdomo: La región representa el 16% de las exportaciones agrícolas globales, 12% de la producción agrícola y 24% de la tierra cultivable del mundo; con 30% de los recursos de agua dulce y 25% de bosques.

“Las nuevas tecnologías e innovaciones ofrecen una gran oportunidad para que América Latina se posiciones como el supermercado del mundo”, subrayó Perdomo en el foro “Tendencias y desafíos agrícolas en América Latina en tiempos de pandemia”, de la Asociación Cultivida.  “Es una región rica para producir alimentos y hacerlo de una manera sustentable”, agregó.

En el caso peruano, las exportaciones llegaron a 143 países y sumaron US$ 7,791 millones (+4.4% superior con respecto a 2019), según cifras del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego; con productos como el jengibre, pimiento, mango, mandarinas, arroz, arándanos, uvas, entre otros, con importantes incrementos en sus envíos.

La oportunidad de abastecer el mundo se fortalece ante la preocupación por la seguridad alimentaria mundial y el incremento de costos de los alimentos que se puso en evidencia durante la pandemia.

“Esta región es esencial para el mundo, para la seguridad alimentaria del planeta, tenemos la oportunidad de seguir produciendo alimentos cada día con mayor eficiencia, con menor costo, mayor productividad, y tenemos las condiciones y la capacidad humana del agricultor, para desarrollarnos de una manera más acelerada”, dijo Perdomo.

Así, advirtió de la necesidad de modernizar las regulaciones que permiten el uso de avances tecnológicos, como drones, biotecnología, entre otros; pues en la región aún prevalecen normas agrícolas desde 1965. Así, hizo énfasis especial en el impulso del uso de la inteligencia artificial, ante la cantidad de información que se genera con dispositivos electrónicos.

El problema, allí, radica en la necesidad de facilitar a los pequeños agricultores el acceso a este tipo de tecnología. “El riesgo es que esta brecha digital o acceso a las tecnologías al pequeño agricultor se hace grande sino modernizamos y llevamos esta información a la mano del agricultor, hoy los teléfonos inteligentes permiten el acceso a la información en cualquier parte del mundo”, dijo.

Finalizó considerando que las autoridades y las industrias tecnológicas deben realizar un trabajo conjunto para que la información de tecnología agrícola “llegue al que la necesite”, al pequeño agricultor, de lo contrario se está dejando una gran oportunidad de producir riqueza y desarrollo para la región.

Fuente: Agronoticias