Se basan en Inteligencia Artificial y aprendizaje automático

Existen en Israel muchos casos de éxito vinculados al sector agrícola, partiendo por los sistemas de riego que han permitido desarrollar cultivos en zonas desérticas o optimizar el uso del agua. En la actualidad, numesosas empresas vinculadas al AgTech y AgFood, a través de tecnologías que incorporan el procesamiento de imágenes y análisis de datos, pueden obtener una alta valoración (convirtiéndose en “unicornios”) y a la vez, ser aportes significativos para el sector agrícola. Así lo señala el periódico israelí Haaretz.

En los últimos años, en muchas de esas iniciativas, sus fundadores fueron ex integrantes del servicio secreto de ese país. Y si antes recurrían a drones o satélites para detectar misisles o instalaciones nucleares, hoy los usan para detectar insectos o larvas de plagas. Y mediante algoritmos y otras herramientas predictivas tratan de hacer estimaciones respecto de la formación o el desarrollo de enfermedades en plantas y cultivos. Incluso para controlar el avance de plagas  o aplicar un tratamiento preventivo.

INTELIGENCIA ARTIFICIAL Y APRENDIZAJE AUTOMÁTICO

En general, las tecnologías desarrolladas se basan en el aprendizaje automático e Inteligencia Artificial (IA) para mejorar la interfaz de gestión de un predio, señala la publicación. En el caso del control de plagas, una de esas empresas emergentes es Taranis, enfocada en cultivos de maíz y soya, desarrolló una tecnología para procesar imágenes aéreas con alta resolución y amplia capacidad de análisis para identificar daños por plagas y enfermedades en esos cultivos. También está el caso de SeeTree, que usa drones de nivel militar que escanean y analizan árboles frutales, como cítricos y almendras, entregando información completa de cada árbol. A nivel de invernaderos, Prospera se centra en la inspección digital de cultivos en esos espacios y Agro-Scout lo hace con hortalizas como patatas y tomates.

A las anteriores se suma GreenEye que utiliza Inteligencia Artificial y la tecnología de aprendizaje profundo para el control de plagas permitiendo pasar de la fumigación abundante de pesticidas a una más precisa en tiempo real y más respetuosa con el medio ambiente.

PROCESAMIENTO DE IMÁGENES

Las tecnologías que procesan imágenes incluyen diversos elementos como robótica, mecanización y soluciones que se basan en la nube, y son los que hacen posible la agricultura de precisión, explica el periódico. Y ello permitiría optimizar los cultivos, mitigando así los problemas asociados a la disponibilidad y suministro de alimentos.

Usando IA y aprendizaje automático, la empresa SeedX desarrolló un sistema robotizado para identificar y clasificar semillas. Además, detemina el porcentaje de germinación y descarta aquellas que contienen enfermedades. Esa tecnología también permite clasificar granos (por ejemplo de café) según su pureza genética usando un proceso de obtención de imágenes. Algo similar realiza ClariFruit. Usando sensores de imágenes garantiza la calidad de frutas y hortalizas en toda la cadena de suministro, de acuerdo a un estándar constante.

ESCASEZ DE MANO DE OBRA

Ante la escasez de mano de obra en las labores agrícolas, una solución han sido las aplicaciones de algoritmos que se basan en el análisis de imágenes en tiempo real, señala el periódico. Es el caso de Tevel, que además incorpora la robótica para cosechar fruta. Aplicado a la presencia de plagas, Senecio Robotics desarrolló robots capaces de identificar y clasificar mosquitos machos, envasarlos vivos en un contenedor especial y liberarlos con drones en un predio.

En esa misma línea, Forrest Innovations produce mosquitos machos 100% estériles capaces de competir con la población de insectos naturales (salvajes). Esta solución se usa en la actualidad para controlar mosquitos portadores de enfermedades en Brasil.

MEJORANDO LA AGRICULTURA TRADICIONAL

Mediante el uso de tecnologías novedosas, el periódico señala que Israel se ha convetido en un centro de innovación global que puede liderar el sector AgTEch y AgFood. Y también, optimizar la producción de alimentos usando menos recursos. Pone como ejemplo que en 1950 un dunam (1/4 de acre) de tierra agrícola alimentaba a 1,7 personas en promedio. En 2000 producía alimentos para 4,2 personas y en 2050 deberá alimentar a 7 personas. De ahí la importancia que cobran estas tecnologías en todos los niveles y ámbitos.

La empresa Growin integra se enfoca en desarrollo de cultivo vertical en interiores para producir frutas y hortalizas frescas en áreas pobladas. La teconología que usa apunta a reducir la pérdida de cultivos, el deperdicio de alimentos y el uso de embalaje no respetuoso con el medio ambiente. En esa misma área, Vertical Field ofrece kits de cutlivo vertical dentro de contenedores de carga reciclados mientras que la empresa TIPA-Corp elabora envases biodegradables con polímeros verticales.

En la línea del mejoramiento genético, Tropic Biosciences recurre a los avances en la edición de genes y ARNi (molécula interferente de ARN) para mejorar cultivos como banana, arroz y café. Dichas tecnologías permiten adaptar atributos en los cultivos incluido el mayor rendimiento y mejorar la resistencia a enfermedades letales.

En el ámbito de la protección de plantas, la plataforma AgreMatch combina algoritmos, alta computación y capacidades bioquímicas para identificar en las plantas las conexiones entre moléculas y sistemas vitales. En este trabajo, agrega el periódico, queda obsoleto el mecanismo de “prueba y error” para detectar sustancias que puedan actual como plaguicidas eficientes y que respeten el medioambiente. En tanto, la firma FortePhest produce herbicidas que pueden ser una alternativa a los desarrollados y para los cuales, las malezas son resistentes.

MÁS ALLÁ DE LAS FRONTERAS

Muchos de los nuevos desarrollos tecnológicos israelíes se usan en otros países, indica la publicación. Es el caso de Avenews que crea y aplica herramientas de Fintech en África al construir una infraestructura basada en teléfonos móviles para dos instituciones bancarias pan-africanas con el fin de financiar iniciativas agrícolas. En tanto, CropTech posee herramientas de planificación agrícola para mejorar y gestionar el uso de la tierra, por medio del análisis de infraestructura de suelo de muchas capas para predios y áreas de mayor tamaño como una región.

En cuanto a polinización, BumbleBee dispone de sistemas mecanizados para polinizar frutales, entre ellos aguacate o arándanos y, a la vez, mejora de manera considerable la calidad y el rendimiento de los cultivos.

Éste último punto –elevar los rendimientos y la calidad de los cultivos– es para esta publicación, el principal desafío para la agricultura en el mundo. Cada una de estas empresas y sus desarrollos específicos puede contribuir a ello. Sólo el tiempo dirá cuál (o cuáles) de ellas será el próximo “unicornio”.

Fuente: Redagrícola