La empresa Multibaies, situada en Anjou, es especialista en arándanos desde hace más de 30 años (producción de plantas, esquejes, contenedores y alveolos) y acaba de obtener la certificación europea para algunas variedades. Este logro es el resultado de un trabajo conjunto entre Multibaies, el SPMF (Syndicat des Producteurs de Myrtilles de France) y el CTIFL.

Esta certificación europea garantiza el control y la trazabilidad para el productor, porque a pesar de que el método in vitro es muy recomendado tanto por los viveristas como por los productores debido a sus numerosas ventajas (homogeneidad, vigor, reactividad y calidad de la presentación), es objeto de ciertas prácticas abusivas desde hace varios años.

Una certificación de dos niveles basada en las normas OEPP
En el aspecto sanitario, los virus y patógenos relativos al Vaccinium corymbosum son principalmente exóticos, lo que no impide a Multibaies realizar controles exhaustivos. «En el caso de los arándanos cultivados, no tenemos necesariamente los virus y patógenos que pueden estar presentes en otras variedades. Es una especie relativamente poco exigente, a diferencia de las frambuesas, las moras o las fresas. Por tanto, la presión sanitaria sobre esta especie autóctona americana es menor. El riesgo reside principalmente en el hecho de que los agentes patógenos se introducen durante la importación».

Para Mathieu Billotte, los riesgos residen principalmente en la conformidad varietal. «Muchos cultivadores, especialmente los que empiezan, no tienen en cuenta los riesgos de comprar a un vivero que no realiza la propagación por sí mismo. Algunos especialistas han empezado a subcontratar la propagación in vitro por razones de coste y, por tanto, ya no tienen ningún control sobre los riesgos. Y, con este modelo, no hay trazabilidad en nada, ni en el origen de la planta, ni en el método de fabricación».

Garantías adicionales para el productor
La certificación europea permite mejorar la cadena de trazabilidad luchando contra estas prácticas que se han desarrollado ampliamente en los últimos años. «Se trata de ofrecer garantías adicionales a nuestros clientes productores. La única certificación real disponible es la de la UE (que sigue la directiva 2008/90/CE) porque impone una trazabilidad y unos controles que no están disponibles en otros lugares. Se proponen otras ‘certificaciones similares’, pero no garantizan la filiación entre el producto y su supuesta dependencia».

Portabilidad a escala europea
Otra ventaja, según Mathieu Billotte, es que sus «clientes de viveros en Europa podrán beneficiarse de la portabilidad». Más concretamente, esto significa que un viverista intracomunitario podrá comprar una planta joven certificada en Francia para trasplantarla en su país y ofrecer a su cliente productor una planta final con certificación comunitaria.

La llave para acceder a las ayudas europeas a la plantación
Al implantar la certificación de la UE este año, los viveros de Multibaies se anticipan a la futura obligación de plantar plantas certificadas para poder acceder a las subvenciones para la plantación. No cabe duda de que esta nueva limitación financiera será un argumento de peso para que esta nueva certificación se convierta rápidamente en la nueva norma.

Un pasaporte para la exportación
Para Multibaies, que exporta el 80% de sus plantones al extranjero, la certificación de la UE también permitirá llegar a determinados destinos con normas reguladoras cada vez más estrictas, pero sigue habiendo cuestiones relativas a los demás mercados.

«Hay ciertos mercados, como el estadounidense, por ejemplo, que están prohibidos. Incluso con la certificación más alta, nos resulta imposible exportar a los Estados Unidos. Ellos, sin embargo, sí pueden, y ahora hay millones de plantones de ese país que se transportan a la Unión Europea. Si estas plantas no están certificadas por la UE, ¿podrán seguir llegando al mercado europeo? Según Mathieu Billotte, este es un punto importante que podría aportar un poco más de juego limpio en términos de competencia. «La producción de plantas de alta calidad es nuestra razón de ser. Nos complace poner nuestros conocimientos técnicos a disposición de los agentes estructuradores, propietarios de la genética, para que puedan desplegar una oferta de plantas certificadas por la UE».

Fuente: Freshplaza